Julio Estefan
Dicen que en el claro del bosque viven los últimos unicornios. La gente está inquieta: quieren capturar uno vivo y confirmar su existencia.
Dicen que para hacerlo, una doncella debe internarse en el bosque y el unicornio, dócilmente, saltará a sus brazos.
Una a una han enviado a todas las jóvenes del pueblo y cada una ha regresado con las manos vacías.
Por no descreer de las doncellas,...