Sorbo, Hugo
Se encontraron.
A los pocos días advirtieron que no podrían vivir separados; decidieron vivir juntos y ahí comenzó todo.
Se miraban y emitían chispas, a veces positivas, en que todo se veía celeste como el cielo, otras rojas, anaranjadas, sus miradas de enojo calculado.
Luego recorrieron un diapasón musical de dichas y sonrisas, entendieron que nada era imposible si permanecían...