Broggi, Felisa
Cecilio y Adela eran hermanos y nuestros amigos. Casi todos los días nos veíamos. Eran años de niñez, de juguetes compartidos, de peleas, de reencuentros. Nos hicimos “grandes”, Cecilio se fue a Tucumán a estudiar y nosotras seguimos su ejemplo, aquí, en Santiago del Estero. El tiempo pasó: amores, ambiciones, enojos, noviazgos. Adela y la tercera de mis hermanas, Elena, se...