Mancilla, Eduardo
Una patota armada de soldados, policías y civiles, acababan de llevarse una familia de la casa de la otra cuadra. A los golpes, patadas y esposados, los apretujaron en dos Falcon verdes.
Los vecinos, reunidos en grupos neutrales, comentaban al amparo de cierta distancia.
- Algo habrán hecho…-, sentenció una vecina oprimida por los ruleros.
- Por algo será…-, aludió...