Vega, Juan Manuel
Al entrar los soldados al pueblo mis niñas corrieron a la milpa, como miles de veces les expliqué que debían hacerlo. Se escondieron, tiradas en el suelo, desde donde miraban nuestra casa. Ojalá hubieran tenido el valor para no gritar mientras miraban como torturaban a su padre. Así a ellas no las hubieran violado y secuestrado, y yo no estaría muerto en vida, pensando cada...