Autobiografía
Soy de sagitario. Tengo cuarenta pero como soy separado me dicen que diga que tengo 35, por lo tanto tengo 35. Escribo, como puedo, como todos. Y ahí se terminó mi vida, es una vida absolutamente aburrida, tengo millones de proyectos completamente irrealizables. Tengo tres hijos, dos grandes de una gestión anterior, Homero, Sofía, y Azul. Homero desempató, porque tenía a Manzi y a Espósito, tenía Enrique Santos Discépolo y Cadícamo, y desempató el poeta Homero.
Conocí a Homero Expósito, yo tenía doce años y mi viejo me llevaba al café de Los angelitos, porque la orquesta del viejo Pugliese cumplía creo que cuarenta años. El nivel de Homero es terrible, porque ellos crecieron leyendo a Baudelaire, a Rimbaud, y a los 15, 16 años escribía unos poemas, que luego fueron tangos conocidos que eran geniales. Y ahora un pibe de 15 o 16, para que despegue de la televisión, con la espátula lo tenés que sacar.